Cuantas veces habremos escuchado a nuestras madres, amigas o hermanas decir : Sal de casa, que pretendes que el príncipe azul te toca la puerta y te diga quieres estar conmigo? y cuantas veces al menos en mi caso habré refutado equívocamente a la misma. Con la excusa que a mi me había pasado, al menos un par de veces . (Solo quiero aclarar que ninguno de ellos eran vendedor de libros y mucho menos testigo de Jehova o el amigo Electrolux que toco mi puerta). Pensándolo mejor y dejando bromas de lado, si tuve que salir o acceder a conocer a los amigos en común para que todo eso fuera posible. Seguir leyendo «El destino no llama a la puerta»