Mis queridos soñadores,         

Si bien en este  gran cuento de hadas que es la Vida, existen los sapos disfrazados de príncipes, los sapos encantados, los sapos asquerosos del pantano, Príncipes sin corona y otros especímenes dignos de fábula.

Debemos reconocer que las féminas no quedamos exentas y también ponemos nuestra cuota en esta historia (obviamente hay casos y casos).

Existen diferentes Clases de princesas, desde las clásicas salidas de un cuento de Disney (de las cuales nos ocuparemos luego) , hasta las que más que escapadas de  un cuento de hadas, parecieran  salidas de un cuento de terror o de una surrealista y  magnífica película de Tim Burton.

En esta ocasión nos dedicaremos a analizar a esas las Sapasas disfrazadas de princesas o como diría uno de nuestro soñadores tremendas RANAS , aquellas que van de estanque en estanque tratando de embaucar a un sapo encantado. Aquellas que inspiran el artículo de hoy dedicado a todos mis sapos queridos aquellos que sufrieron por Amor.

Así es,  porque aunque pareciera el título de alguna vieja novela mexicana ““Los hombres también lloran” y sufren en silencio penas de amor.

Luego de una profunda investigación y gracias a la colaboración de algunos sapos amigos, puedo mencionarles  que estos especímenes que dicho sea de paso nos malogran a nosotras las comunes mortales el mercado, aunque por orgullo de género nos cueste admitir EXISTEN y más de las que a nuestros sapos encantados les gustaría imaginar.

En el camino de la vida hemos  podido diferenciar algunos tipos de Ranas. Aquí algunos de ellos:

-Las Ranas desencantadas, Las Ranas trepadoras, Las Ranas clonadas y  Las Ranas Sanguijuela.

A estas alturas me imagino que muchos caballeros podrán definir muchos más especímenes de las mismas; Pero hoy solo nos abocaremos a las ahora descritas.

LAS RANAS DESENCANTADAS son las que menos abundan, en realidad  se trata de ex Princesas, aquellas que víctima de algún sapo disfrazado de príncipe sufrió y hoy busca venganza o simplemente Amor a toda costa.

Puede también que sea una Princesa disfrazada de Rana, la cual aún viva en un castillo encantado junto a su Rey o Príncipe consorte, el cual la tiene cual Rapunzel encerrada en el castillo sin ninguna atención y la busca en otro lado a toda costa sin importarle que la otra parte (llámese Príncipe consorte o «El Otro» sapo enamorado) sufra una terrible decepción.

Si bien este tipo de Ranas es la más inofensiva para nosotros la sana competencia, causa daños irreversibles en el género opuesto.

LA RANA TREPADORA aquel espécimen que sirviera de inspiración a muchos autores y canciones, quien no recuerda la tonadita aquella de «NO TIENE TALENTO PERO ES BIEN BUENA MOSA «. Pues a ese tipo de Ranas nos referimos; Aquellas que no les importa nada ni nadie con tal de conseguir sus  propósitos.

Aunque deberíamos aclarar que si tienen talento y mucho  para embaucar Sapos incautos, muchas veces nada favorecidos (insisto siempre hay excepciones).

Son aquellas que se valen de una cara bonita o algún otro «Don» para conseguir lo que quieren y casi siempre lo consiguen. Aunque luego se aburran y dejen jugando hula -hula por no decir coloquialmente tirando cintura a ese sapo gordo y salen brincando a otro estanque en busca de un nuevo reto y por consiguiente una nueva víctima.

También tenemos  a las RANAS CLONADAS, aquellas parientes directas del perro del hortelano, quienes son ellas? te preguntarás. Pues son aquellas ranas indecisas que ni comen ni dejan comer.

Las Ranas buenas amigas, las que te convierten en sus confidentes, su apoyo su compañero incondicional, paño de lágrimas y demás.

Aquella Ranitas que con una gran sonrisa hacen que todo alrededor desaparezca, aquellas que por momentos te pueden hacer creer que están listas para dejar que el cariño fluya y pase de una amistad sincera a algo más grande (nada más lejos de la realidad). En el momento que nuestro sapo querido esté a punto de tirarse al otro charco le sacan el Loto y cae de panzazo al estanque sin flotador y mucho menos paracaídas, estrellándose con frases tan duras y comunes como estas : Pero yo te quiero como a un hermano, no quiero malograr la bella amistad, en que momento te hice pensar que podía suceder (obviamente se olvidan las veladas caminando a la luz de la luna, cuando reposaba su cabeza en tu hombro y otras para ti  «señales claras»).

En resumen muy diplomáticamente te rechazan,  pero eso si pobre de la rana o princesa que ose acercarse a su SAPO amigo, sacan las ancas de rana bien afiladas y defienden el que sin ningún derecho llama su territorio.

Remedio o antídoto : Explicarle a tu rana clonada que lejos de ser tal cual se proclama una amiga casi hermana, está siendo una rana muy egoísta que si no quiere el amor sincero que le brindas pues te deje ir a buscar tu felicidad en otro estanque.

El  Sapo tendrá que delimitar territorio y alejarse, si la rana clonada y confundida lo extraña y en su ausencia descubre que afloraron nuevos sentimientos regresará, sino tiene el camino despejado para buscar el amor en otra rana o preferiblemente Princesa del Reino.

Por último le toca el turno a una de las RANAS más conocidas, aquellas que las mujeres llamamos cochina y mala competencia, mientras que  los hombres luego de pensar que eran su sueño hecho realidad, llaman ahora su peor pesadilla.

LAS RANAS SANGUIJUELAS  Aquella que está contigo hasta que te chupa la última gota de sangre, en este caso hasta que vacía toda tu cuenta bancaria y luego de hacerlo sin compasión salta a un estanque cercano y empieza a conquistar a su nueva víctima.

Esta clase es la más fácil de identificar, por lo general la conociste con un galán del brazo y posiblemente te hayas preguntado que tiene ese Sapo maltrecho que no tenga Yo, luego posiblemente  la billetera te haya dado la clave.

Son muy amorosas sobre todo cuando de pedir algo se trate, te complacerán en todo. Trataran como el REY de los sapos, cuando en realidad lo que estás haciendo de ti es el REY de los tontos.

Por lo general siempre salen en pares y bien producidas.

Muchas de ellas no tienen oficio conocido pero se llevan la gran vida.

Si bien como lo dijéramos anteriormente este espécimen es  muy fácil de identificar, principalmente es para nosotras las mujeres, generalmente y lamentablemente nuestros queridos amigos los sapos encantados no ven o no quieren verla,  hasta que sufren las consecuencias directas.

REQUISITOS PARA CONVERTIRTE EN VICTIMA (Debo decir novio de esta Rana, que es casi lo mismo)

Ser un príncipe hechizado y VIVIR  en un fashion Pantano y/o estanque, obviamente el mismo tiene que medir muchos metros cúbicos.

• Si no tiene renacuajos mucho mejor y si los tiene que vivan lejos, si no es así no importan sacan a relucir sus dotes de actrices hasta que atrapan por fin al incauto y sacan las garras en este caso las ancas de rana bien afiladas y al menor descuido, los pobres terminan en un internado a muchos kilómetros del Reino.
• Estar dispuesto a cumplirles todos sus caprichos. Obligatoriamente deberá mimarla, engreírla, COMPRARLA con regalos suntuosos (Con tal ella es una bella princesa que lo sacara del pantano en que se encuentra sumergido y tendrá el privilegio de pasearse de su brazo por lagos y ciudades) eso obviamente tiene un costo, muchas veces bastante alto.

TERMINANTEMENTE PROHIBIDO

• Quedarse en la ruina ya sea por la caída de la bolsa o por cumplirle sus caprichos, pues al día siguiente de reconocer tal situación no le veras ni el polvo y mucho menos pretendas que  te devuelva los regalitos.
• Ni se te ocurra presentarles a un sapo amigo, mucho más garboso y menos aun con una billetera más gruesa. Pues al menor descuido por ahí se nos escapa y el amigo no resulta tan amigo y la princesa Rana se convierte en Sapasa y arranca con el mismo.
• Por último ni se te ocurra darte cuenta y dejarla oportunamente te tildará de Amante de sapos del mismo género, hasta de pobre indigente o cromañón agresivo e iletrado, creándote una reputación no digna para ninguna nueva Rana al acecho y lo peor de todo espantándote a las princesas del Reino.
• Si eres un Sapo prospecto y encontraste algunas similitudes entre las ranas presentadas y la dulce Princesa que orgullosamente llevas del brazo prepárate, porque COLORIN COLORADO, ESTE CUENTO AUN NO SE HA ACABADO.